Gran parte de los fabricantes de automóviles están evaluando la posibilidad de ampliar su línea de negocios para pasar de la venta de automóviles,  a ofrecer una serie de servicios dedicados a la recarga de vehículos eléctricos, entre los cuales se encuentra la recarga móvil de los mismos.

La oficina de patentes de Estados Unidos publicó a mediados de marzo del año en curso, una nueva solicitud de patente presentada por Ford en septiembre de 2018 relacionada a la recarga móvil de vehículos eléctricos, donde se facilitaba su carga múltiple , empleando diferentes tecnologías,  creando un sistema muy eficiente y funcional, con un  mayor nivel de portabilidad, flexibilidad y modularidad.

Ford describe con el nombre de “Portable Charging System and Charging Method (Sistemas y métodos de carga portátil)” las diferentes combinaciones que se pueden encontrar utilizando diferentes cargadores móviles, ordenando los posibles escenarios y estableciendo los procedimientos y los equipos que habría que emplear en cada uno de ellos.

El objetivo primordial, es ofrecer al operador flexibilidad para el uso de cargadores según las necesidades de los vehículos que debe cargar, evaluando las diferentes capacidades de las baterías vs. La rapidez en la carga; así, si una batería es de gran capacidad y no requiere una carga rápida,  se podrían emplear varios cargadores en serie con baterías pequeñas para completar la recarga. Por otra parte, si lo que se necesita es cargar rápidamente una batería pequeña, por ejemplo de un híbrido enchufable, esta operación se debería hacer con un solo cargador.

Poco a poco van surgiendo propuestas para que la recarga de vehículos eléctricos se convierta en una tarea automatizada, que no requiera intervención de humanos. No obstante, es la primera vez que vemos el concepto de parte de un fabricante de vehículos; en diciembre del año pasado, Volkswagen presentó un robot autónomo e inteligente capaz de recargar un coche eléctrico por sí solo ofreciendo este servicio en cualquier sitio, sin la dependencia de un puesto de recarga fijo, ni de la intervención del conductor para enchufar el vehículo. Todavía es un concepto futurista, pero es un paso más hacia una recarga completamente autónoma sin necesidad de que intervengan humanos.

Esta solución se aproxima a una de las que Ford describe en su patente. Otra posibilidad es que los vehículos de asistencia en carretera incorporen un cargador móvil para socorrer a aquellos conductores que se hayan quedado sin batería.