El mito del tubo de escape largo, la idea de que los vehículos eléctricos generan emisiones más altas que los vehículos de combustión interna (ICE) si funcionan con electricidad generada por combustibles fósiles, ha sido definitivamente refutado por muchos estudios científicos.

La última incorporación a la literatura es » El papel de la electrificación de camionetas en la des carbonización de vehículos livianos «, realizado por investigadores de Ford y la Universidad de Michigan, y publicado en la revista Environmental Research Letters.

Los investigadores analizaron tres opciones diferentes de tren motriz (motores de combustibles fósiles, híbridos y vehículos eléctricos) en tres clases de vehículos diferentes: sedanes medianos, SUV medianos y camionetas pickup grandes. Descubrieron que, en promedio en EEUU, los vehículos eléctricos livianos tienen aproximadamente un 64% menos de emisiones de gases de efecto invernadero del ciclo de vida de la cuna a la tumba que los vehículos ICE.

Cuanto más grande es el vehículo, mayor es el beneficio de la electrificación. Se encontró que la reducción promedio de emisiones de por vida es de aproximadamente 45 toneladas de CO₂ para sedanes, 56 toneladas para SUV y 74 toneladas para camionetas. Ese es un hallazgo que tiene especial relevancia para Ford, el vendedor líder mundial de camionetas.

Sí, los vehículos eléctricos tienen mayores emisiones de gases de efecto invernadero que los vehículos de gas durante la fabricación, debido a la producción de baterías, pero la brecha se compensa con el ahorro de emisiones en su funcionamiento.

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Sí, importa dónde se opera un vehículo, debido al “impacto de la temperatura ambiente en el ahorro de combustible y la variabilidad en la intensidad de carbono de la red en los Estados Unidos”. Aparentemente, hay algunas regiones con redes particularmente marrones, en las que las emisiones de vehículos eléctricos superan ligeramente las de un ICE promedio. Por otro lado, en las regiones con las redes más limpias, las emisiones de vehículos eléctricos son mucho más bajas. El estudio encontró que, teniendo en cuenta todos los condados de EEUU, las emisiones de gases de efecto invernadero de los vehículos eléctricos son del 13% al 118% de sus contrapartes de ICE. Las regiones marrones son pocas: «Los BEV tienen emisiones de GEI más bajas que los híbridos en el 95%-96% de los condados de EE. UU. y emisiones de GEI más bajas que los vehículos ICE en el 98%-99% de los condados».

El autor principal del estudio, Greg Keoleian, profesor de la Universidad de Michigan, dijo:

«Este es un estudio importante para informar y alentar la acción climática. Nuestra investigación muestra claramente reducciones sustanciales de las emisiones de gases de efecto invernadero que se pueden lograr a partir de la transición a sistemas de propulsión electrificados en todas las clases de vehículos. Informamos las emisiones para las etapas de producción, uso y fin de vida del vehículo por milla y durante la vida útil total del vehículo. Además, analizamos la variación regional de las emisiones teniendo en cuenta las diferencias en las combinaciones de redes eléctricas y las temperaturas ambientales, y también exploramos los efectos de la tasa de des carbonización de la red en la reducción de emisiones”.

Fuente: ChargedEVs