Con el objeto de que los vehículos eléctricos representen el 50% para fines de esta década, el gobierno tailandés solo permitirá la venta de vehículos puramente eléctricos a partir de 2035.

Kawin Thangsupanich, asesor del comité de política nacional del Ministerio de Energía,  dijo:

“Podemos ver que el mundo se dirige en esa dirección, así que tenemos que movernos rápidamente”.

 

Al adoptar una postura clara, el país también espera volverse más interesante para los inversores. Básicamente, Tailandia quiere poner en juego su know-how en la producción de automóviles. La industria del automóvil es uno de los sectores más importantes de Tailandia. Según Bloomberg, representa alrededor del diez por ciento de la economía.

De ser el centro del sudeste asiático para la producción de automóviles convencionales, Tailandia ahora quiere convertirse en un centro para los automóviles eléctricos, «porque ya tenemos las cadenas de suministro existentes», dijo Kawin a la agencia de noticias.

 

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En el 2018, el proveedor de servicios de desarrollo de vehículos con sede en Aquisgrán FEV,  fundó una subsidiaria tailandesa para apoyar al sector de la movilidad regional en el desarrollo de vehículos, motores, transmisiones y accionamientos eléctricos, incluidas baterías y pilas de combustible de hidrógeno.

 

Fuente: Electrive