Blackstone Technology GmbH podrá comenzar la comercialización de baterías de iones de sodio de estado sólido impresas en 3D a partir de 2025. Blackstone, junto con una industria alemana y un consorcio de investigación, llevarán los resultados de laboratorio validados de las baterías de estado sólido impresas en 3D a la fase de demostración, en un entorno real en los próximos tres años. Los resultados del proyecto de desarrollo formarán la base para el producto listo para el mercado.

Con el objeto de implementar lo anterior, se invertirán 32 millones de euros en una planta piloto en el sitio de producción en Döbeln y en extensos desarrollos. Además, se está desarrollando el escalado de electrolitos en estado sólido en base sodio a escala de toneladas para poder producirlos en el Grupo Blackstone a partir de 2025.

Este proyecto está siendo financiado por el Ministerio Federal de Economía y Protección del Clima de Alemania como parte de su apoyo al ecosistema de fabricación de celdas de batería con un total de hasta 24,1 millones de euros (sujeto a que la decisión de subvención sea legalmente válida).

 

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Las baterías de estado sólido impresas en 3D producidas como parte del proyecto se instalarán en un autobús eléctrico operado por la empresa Eurabus con sede en Berlín,  para demostrar su rendimiento en: condiciones del mundo real.

La empresa Zeiss aporta su amplia experiencia en metrología y microscopía. Los Institutos Fraunhofer IFAM, IKTS, IST y el Instituto de Tecnología de Partículas de la Universidad Técnica de Braunschweig trabajarán en la validación de procesos, el desarrollo de procesos, el reciclaje, la seguridad y la evaluación del ciclo de vida económico-ecológico.

El sistema químico de las baterías de iones de sodio es comparable en partes con las celdas de iones de litio. Una ventaja significativa de las baterías de sodio es que las materias primas se pueden obtener mucho más fácilmente y de forma más respetuosa con el medio ambiente con tecnología comparable. La disponibilidad de sodio es muchas veces mayor que la del litio y el precio es significativamente más bajo, especialmente dado el reciente aumento de los precios del litio. Además, la materia prima no tiene por qué ser importada de fuera de Europa como ocurre con el litio.

La construcción de una celda de batería de estado sólido no solo aumenta la densidad de energía, sino que también mejora muchos aspectos de seguridad de la batería. La producción de prototipos de baterías de sodio está diseñada de tal manera que se puede utilizar una amplia variedad de materiales activos. Por lo que, los ajustes específicos del producto en la batería a nivel de celda se pueden realizar de forma rápida y rentable. El proceso de impresión juega un papel decisivo y permite la optimización volumétrica además de la adaptación geométrica.

 

Fuente: Green Car Congress