Un nuevo informe de The Brattle Group plantea que los vehículos eléctricos serán un gran cambio para el sector de energía eléctrica de los EE.UU. Los economistas del grupo predicen que el número de vehículos eléctricos en los EE.UU aumentará de 1.5 millones en 2020 a 10-35 millones para 2030. Calculan que el sector de la energía eléctrica necesitará invertir entre $ 75-125 mil millones para 2030, para servir a 20 millones de vehículos eléctricos, incluyendo el despliegue de 1-2 millones de cargadores públicos.
El informe, «Llegar a 20 millones de vehículos eléctricos para 2030: Oportunidades para la industria eléctrica en la preparación para un futuro EV», incluye los siguientes pronósticos:
- 20 millones de vehículos eléctricos agregarán 60-95 TWh de demanda anual de electricidad y 10-20 GW de carga máxima, lo que requiere 12-18 GW de capacidad de generación renovable.
- Las inversiones totales probablemente incluirán $ 30-50 mil millones para generación y almacenamiento, $ 15-25 mil millones para actualizaciones de transmisión y distribución (T&D) y $ 30-50 mil millones para cargadores EV e infraestructura del lado del cliente.
- El ahorro en el costo del combustible será de $ 12 mil millones / año, lo que se traduce en un período de recuperación de la inversión de 8.6 años. Si el valor de las emisiones evitadas de gases de efecto invernadero se incluye en $ 50 / tonelada, el período de recuperación disminuye a 7,2 años.
- Las baterías instaladas en 20 millones de vehículos eléctricos tendrán una capacidad de almacenamiento de electricidad de hasta 1.600 GWh. Podrían alimentar hasta 300 GW de energía a la red para ayudar a integrar las energías renovables una vez que las operaciones de gran escala de vehículo a red (V2G) sean viables. Esta capacidad de almacenamiento V2G supera ampliamente la capacidad actual proyectada de almacenamiento de la red.
El estudio indica que las empresas de servicios públicos están bien posicionadas para invertir en una parte sustancial de la infraestructura necesaria para impulsar la adquisición de vehículos eléctricos, ayudando así, a alcanzar los ambiciosos objetivos de las políticas para la electrificación.
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El coautor del estudio, Sanem Sergici, dijo:
«La electrificación del transporte plantea incertidumbres para las empresas eléctricas, pero también crea oportunidades para impulsar la des carbonización acelerada, administrar la confiabilidad de la red, mejorar la utilización de los activos y convertirse en organizaciones más centradas en el cliente. Si bien este análisis se enfoca principalmente en vehículos ligeros, la electrificación de flotas comerciales y camiones de carga aumentará aún más las oportunidades relacionadas con la electrificación».
Mientras que el coautor del estudio, Michael Hagerty, expresó lo siguiente:
«Si bien los vehículos eléctricos y los cargadores se están volviendo más comunes en nuestra vida cotidiana, la industria realmente solo está viendo la punta del iceberg cuando se trata del impacto que los vehículos eléctricos tendrán en la red. Los planificadores de sistemas en toda la cadena de suministro de electricidad deben comprender mejor y prepararse para los impactos de los vehículos eléctricos, incluidas las oportunidades para la participación de vehículos eléctricos en el equilibrio del sistema».
Fuente: Charged