El Partido Laborista del Reino Unido ha pedido al gobierno liderado por el Partido Conservador que acelere la eliminación gradual de los automóviles de combustión interna (ICE) del 2035 a 2030. Los laboristas quieren asegurarse de que el país cumpla con los objetivos del Acuerdo de París y también reducir más rápidamente la contaminación del aire.

El gobierno había prohibió originalmente la venta de autos ICE nuevos a partir de 2040. En febrero, el primer ministro Boris Johnson adelantó la prohibición hasta 2035. Un gran número de miembros conservadores del parlamento apoyan el llamado del Partido Laborista para un movimiento más rápido hacia los vehículos eléctricos.

 

Rebecca Newsom, jefa de política de Greenpeace Reino Unido, dijo:

«Me quito el sombrero ante los laboristas por respaldar la prohibición de 2030 para todos los automóviles y camionetas nuevos de gasolina, diésel e híbridos.»

 

Se han unido al coro de empresas y consejos que también han estado pidiendo una fecha de eliminación más ambiciosa y políticas para apoyar a los trabajadores en la transición, a fin de reducir drásticamente las emisiones y ayudar a asegurar un futuro para la industria automotriz del Reino Unido.

Ahora que el Partido Laborista y más de 100 parlamentarios conservadores han lanzado el guante, ¿cumplirá el gobierno con sus afirmaciones de ser un líder mundial en el clima y respaldará también una prohibición de 2030?

Incrementando el ecosistema sostenible para el Reino Unido, se sigue avanzando en la creación de plantas de producción de hidrógeno verde, alimentados por los parques eólicos y solares de Scottish Power que ayudarán a producir hidrógeno para hacer funcionar autobuses, transbordadores y trenes.

ScottishPower Renewables, ITM Power, que fabrica equipos integrados de energía de hidrógeno, y BOC, que se especializa en comprimir y distribuir gases, ayudará a transportar el gas de hidrógeno a los ayuntamientos, crearán las instalaciones necesarias para que los vehículos sean alimentados con hidrógeno. Las tres empresas buscan crear una solución de extremo a extremo.

El primer proyecto de la asociación es ‘Hidrógeno verde para Glasgow’. Una planta de producción de hidrógeno verde propuesta ubicada en las afueras de la ciudad sería operada por BOC, utilizando energía eólica y solar producida por ScottishPower Renewables para operar un electrolizador de 10MW, entregado por ITM Power. El proyecto tiene como objetivo suministrar hidrógeno al mercado comercial en los próximos dos años.

 

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Se espera que los planes se reproduzcan en todo el país. Lindsay McQuade, directora de energías renovables de Scottish Power, dijo:

«Nuestro enfoque revolucionario, que realmente cambiará las reglas del juego, respalda plenamente la transformación a gran escala necesaria para reemplazar los vehículos pesados ​​diésel con alternativas más limpias y ecológicas.»

 

Fuente: Electrek